A estas navidades las compras online serán las protagonistas

Aunque no es algo que sorprenda a la mayoría de los lectores (que han visto cómo durante los últimos meses su actividad online cobraba un mayor protagonismo, ya sea teletrabajando, asistiendo a sus clases de forma remota, manejando sus inversiones más o menos modestas o llenando la nevera comprando a través del ordenador), estas navidades elegir y comprar los regalos se realizará de forma online preferentemente, a través de servicios como Amazon prime, Aliexpress… cuyos marketplaces no solo sirven de puntos de venta a las grandes superficies (que suelen contar con sus propias plataformas de venta online) sino también a pequeños comerciantes de todo el mundo.

Proeza logística

Y es que si algo nos ha demostrado la actual pandemia (además de que el estado chino es capaz de montar un hospital de campaña completo en pocos días) es que empresas como la que dirige Jeff Bezos son capaces de mantener el flujo de mercancías alrededor del mundo a pesar de las dificultades, capacidad que este año pondrán al servicio de Santa Claus y sus duendes, ya que las distintas restricciones de movilidad, horarios y aforo que el coronavirus ha obligado a tomar dificultan (y desaconsejan) acudir directamente al establecimiento para adquirir los presentes, buscando en nuestra app de ventas favorita probablemente encontremos al vendedor al que queríamos acudir de forma presencial (y si no, siempre podemos ponernos en contacto con ellos para asegurarnos de que venden de forma online).

Y es que de la necesidad que la sociedad moderna ha demostrado tener de organizaciones empresariales capaces de colocar en días (u horas) un producto fabricado en Taiwán en Buenos Aires, Caracas, Miami o Madrid en mitad de la primera pandemia del siglo XXI, estas empresas han obtenido cotizaciones en bolsa que les hacen rivalizar en poderío económico con países de tamaño medio de Europa o América Latina.

Amazon multiplica su valor casi por veinte en una década

En enero de 2011 la acción de Amazon rondaba los 170 dólares, hoy vale más de 3.200 dólares. Como no es posible volver atrás en el tiempo para invertir hasta nuestro último centavo en la compañía de Bezos y el precio de la acción es realmente alto, puede que muchos inversores potenciales se echen para atrás, aunque siempre es posible invertir sin comprar las acciones directamente mediante una plataforma de trading, por ejemplo a través de una app de Forex, acciones, índices, etcétera con CFDs, forma de invertir que tiene sus pros y sus contras.

Una de las características más importantes de operar en estas plataformas de trading online es que no se compran las acciones (o cualquier activo con el que se opere), y por lo tanto se pueden abrir operaciones prediciendo caídas en la cotización y ganar dinero si la operación acaba resultando favorable. Tampoco podrá venderse un activo en caso de que suba para recoger beneficios, ya que este no se posee, pero sí que se podrán abrir posiciones prediciendo subidas, y alegrarse junto con los afortunados accionistas al sumar beneficios si las operaciones salen bien.

Otra característica fundamental, igual de importante que la anterior, es que las operaciones están apalancadas, lo que quiere decir que se puede operar como si se tuviera más capital del que realmente se tiene, y todos podemos ver lo que ello implica, si se tiene éxito se gana más, si se falla se pierde más, y las pérdidas (que pueden sucederse muy rápidamente y ser muy elevadas) dependerán del nivel de apalancamiento utilizado además de lo que haya fluctuado a la contra o lo volátil que se haya comportado el activo, en el caso de las acciones se trata de activos que pueden llegar a ser muy volátiles, además de que el entorno económico actual es de volatilidad generalizada. Es importante operar con un bróker de trayectoria bien conocida, y es fundamental conocer todo lo relacionado con el trading online, su funcionamiento y riesgos antes de comenzar a operar, recomendablemente con una cuenta demo al principio, no estaría de más realizar alguno de los cursos online (muchos de los cuáles son gratuitos) que los brókeres ofrecen, u otros en páginas especializadas, sobre todo en el caso de ser novatos en el mundo del trading, ya que como los propios brókeres avisan en sus plataformas la mayoría de cuentas minoristas terminan por perder más de lo que ganan.

Por lo demás la formación del trader no difiere mucho de la del accionista clásico, que deberá ser constante e incluir toda la información económica que pueda absorber, no solo la que afecte a la empresa cuya cotización se esté utilizando para hacer trading, sino también todo lo que pueda influir en su buena o mala marcha, sólo así se podrán crear predicciones de movimientos de precios sólidas y, aun así, nadie asegura nada.