En épocas de desconfianza una máquina nos muestra la verdad

Por: Mariela Zuni M.

 

En nuestra sociedad, el ciudadano de a pie ha dejado de confiar, no cree en sus autoridades, ni políticos, en el plano empresarial pasa lo mismo, para muchos empleadores el obtener un personal honesto es una gran preocupación, principalmente al comprobar la veracidad del contenido del currículum vitae o en las entrevistas personales.

 

En el pasado cuando querían comprobar si alguien mentía se aplicaba la prueba de “la cola del burro”, la cual consistía en que el trabajador tenía que tocar la cola del animal, si este rebuznaba  estaba mintiendo. Lo que las personas no sabían es que dicha parte del asno estaba impregnada con polvo de carbón, quien quería ocultar algo no la tocaba y terminaba con las manos limpias delatándose.

 

La naturaleza observadora del hombre también era puesta de manifiesto en algunas prácticas, aunque rudimentarias, para detectar la mentira. La prueba de la “cuchara caliente” era una de ellas, donde la pieza de metal era expuesta a altas temperaturas, usada en un interrogatorio se colocaba en la lengua de una persona, si se quemaba estaba mintiendo, pues se creía que cuando una persona estaba nerviosa las glándulas salivales se secaban.

 

En muchos países del globo las empresas han optado por el uso del polígrafo o también llamado “máquina de la verdad” como una herramienta para el reclutamiento del personal. En el Perú, y específicamente en Arequipa, dicho aparato se perfila como un instrumento primordial para las áreas de recursos humanos y hasta para el descubrimiento de ilícitos.

 

El polígrafo es un aparato que se ha usado desde el siglo pasado, el cual aplica la lectura de diversos cambios internos del ser humano, como su respiración, la frecuencia cardiaca y la electricidad que recorre el cuerpo.

 

Jurgen Hess Arce, es un joven poligrafista que desde hace ocho meses trabaja en Arequipa y aplica la prueba del polígrafo a solicitud de empresas de diversos rubros, no solo en la selección de personal, también para detectar a los malos elementos involucrados muchas veces en actos delictivos al interior de sus centros laborales.

 

La tendencia a cometer actos ilícitos en las empresas no solo se reducen al área local. En América Latina el polígrafo es utilizado desde hace muchos años, por ejemplo, es considerado como prueba judicial en Guatemala y Panamá, también en algunos estados de los Estados Unidos. En Honduras, este año fue manejado en la selección de los magistrados de la Corte de Justicia.

 

Hess explica que en las empresas existe una fuerte preocupación por la crisis de honestidad. Los robos, hurtos, falsificación genérica de documentos o la sustracción de dinero llevan a los empleadores a ser más rigurosos en la selección de su personal. Buscan un perfil de honestidad.

 

El “robo hormiga” es una de las modalidades más graves de deshonestidad en las compañías, los primeros casos se presentaron en España y República Dominicana, la cual consistía en la sustracción sistemática de pequeñas cantidades de dinero hasta que el monto se volvía grande y recién era detectado.

 

CONFIANZA

En tiempos donde el grado de desconfianza es grande, y en el Perú con el tema de la corrupción, la máquina de la verdad es una herramienta verídica que da un grado de confianza del 99% en la evaluación del personal.

 

El poligrafista nos explica que el porcentaje de la gente que no quiere someterse a dicha prueba es mínimo, de mil uno, normalmente es el personal que postula a un puesto de trabajo. En tanto, el trabajador que ya labora en la firma es más reacio a pasar el polígrafo, algunos aducen que es un maltrato, una vejación a sus derechos, y se revelan, “mucha veces son personas que esconden algo, de cinco unas cuatro”.

 

No todas las empresas utilizan los exámenes psicológicos y talleres de capacitación, todo depende de la política. No todos están de acuerdo con el polígrafo porque afirman rompe el nivel de confianza. Pero cada vez se hace más necesario para descubrir la verdad.

 

EL POLÍGRAFO

La máquina de la verdad fue creada los primeros años del siglo XX. Fue la conjunción de descubrimientos hallados por separado: el Galvanómetro que mide la corriente eléctrica del cuerpo, que se incrementa o baja dependiendo del estado de la persona; la manga cardiaca mide la presión arterial; el neumógrafo que evalúa la respiración.

El polígrafo es un instrumento único que puede medir todos esos cambios internos del cuerpo humano en un solo aparato. También cuenta con un ordenador que recibe y procesa toda la información transmitida por el sistema de adquisición de datos.

 

Parte fundamental para un resultado al 99% fiable es el desempeño del poligrafista. Jurgen Hess, por ejemplo, prepara un cuestionario de 170 preguntas que la persona debe responder previamente, posteriormente con la máquina se formulan unas cuatro interrogantes, las más importantes dependiendo del perfil exigido por el empleador. La prueba dura aproximadamente hora y media.

 

Para Hess, la prueba psicotécnica que se aplica en el reclutamiento de personal es muy subjetiva, pues la persona debe responder un cuestionario y realizar dibujos. En su opinión ello no dice mucho de los postulantes, al responder según su estado de ánimo en ese instante, “es muy subjetivo”.

“En el campo laboral con el polígrafo la gente te rebela las cosas, como las hace, te hablan de drogas, alcohol, maltratos, despidos, renuncias. En la entrevista más vale la experiencia y la capacidad del entrevistador (poligrafista), que tiene una máquina que lo apoya, no como amenaza sino como instrumento de persuasión”, aseveró el especialista.

 

ÉTICO

Hess comenta que es una necesidad saber si te están siendo sinceros desde distintos motivos. En el caso de los candidatos a la presidencia de la República que mienten respecto a su grado académico los descalifica éticamente, al igual que un postúlate a un trabajo cuando falsifica un certificado laboral o de estudios.

 

Muchos consideran que el polígrafo es un método invasivo de la privacidad, pero si se aplica con el consentimiento de la persona es totalmente válido.

 

DEMANDA

En Arequipa son muchas las empresas que demandan del uso del polígrafo. Compañías de seguros, vigilancia y seguridad, hoteles, transporte de valores, tiendas de servicios, consultoras, empresas textiles y otros.

 

El especialista señala que muchas veces ha tenido que acudir ante el llamado de empleadores y asistir en horas de la noche o madrugada, para evaluar al personal por la sospecha de un robo interno. Afirma que el grado de efectividad es alto.

 

En el Perú aunque el uso del polígrafo no está regulado legalmente, hay una gran tendencia a generalizarse en la clasificación de los trabajadores.