Se estima que Israel retiene a unos 4500 palestinos en sus cárceles, entre ellos 41 mujeres y 140 niños menores de 18 años, la mayoría simplemente por desafiar la ocupación.

El 17 de abril de cada año, los palestinos conmemoran el Día del Prisionero para expresar su lealtad a los encarcelados por desafiar la ocupación de Israel y como recordatorio a la comunidad internacional de su legítima lucha por la libertad.

Casi 550 reclusos padecen diversas enfermedades, requieren una estrecha vigilancia y atención médica.

Al menos 10 presos padecen cáncer de diversos grados. Hasta ahora, 368 palestinos encarcelados han sido infectados con el coronavirus.

Algunos palestinos han pasado 40 años en cautiverio y 543 han sido condenados a varias cadenas perpetuas.

El jueves, los partidarios encendieron una “antorcha de la libertad” para los prisioneros frente a la tumba del difunto presidente Yasser Arafat en Ramallah, marcando el inicio de la conmemoración anual.

«Los prisioneros tienen su presencia en toda la vida palestina y merecen de todos nosotros lealtad y trabajo continuo para aliviarlos a ellos y a sus familias porque sacrificaron años de su juventud por la libertad de Palestina», dijo Sabri Sidam, miembro del Comité Central de Fatah.

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