Arequipa

Lagunas de Mejía no tienen agua

21 de enero de 2016
Lagunas de Mejía no tienen agua
Zonas están afectadas por reducción del nivel de la cuenca. Las áreas protegidas y la agricultura están en problemas.
……….
 
Por Lino Mamani A.
Fotos Adrián Quicaño P.
(Enviados especiales)
 
Quien compra un departamento en Mejía siempre mira al mar, nunca hacia atrás. Atrás se encuentra el agro, la reducción de la cuenca hídrica y el peligro de reducción de la producción de arroz de hace más de 18 años en el valle de Tambo (Islay), desde la última gran sequía en Arequipa. Tampoco mira el problema en el Santuario Nacional de las Lagunas de Mejía.
El nivel de agua de su capacidad habitual se redujo y trajo como consecuencia que muchas especies de aves migren hacia otras zonas por falta de peces para alimentarse.
A más de dos horas de la ciudad está situada la reserva de Mejía, que hoy parece más desolada que de costumbre. El agua que se almacena en estos humedales depende directamente de la cuenca del río Tambo, que actualmente redujo su capacidad por la falta de lluvias en las partes altas.
Tenemos problemas que las autoridades aún no evaluaron y no saben la magnitud, dijo el jefe de la reserva, Henrry Alayo Calizaya, quien agregó: “Debemos ser parte de la emergencia a consecuencia de El Niño”.
En la zona se avistan alrededor de 210 especies de aves, las cuales en esta temporada de verano en el sur (e invierno en Centroamérica) migran hacia esta zona. Sin embargo, ahora se da el caso que por falta de agua y de alimento muchas migrantes vuelan hacia otras zonas porque en el lugar el nivel de agua está por debajo de su nivel habitual.
Alayo Calizaya asevera que por esta fecha el nivel solía estar en 1.50 m.s.n.m., sin embargo, actualmente alcanza  1.10 m.s.n.m.
“Hubiera sido menor el nivel, de no ser que nosotros hicimos limpieza de las zonas colmatadas para permitir que pueda pasar el agua”, sostiene.
El problema no es de ahora, sino desde hace varios años y está condicionado al nivel del río. Pero si la situación sigue, podrían secarse más de dos de las tres lagunas.
“Tenemos una laguna que se llena por esta fecha, pero como verán está vacía. Mientras que la segunda en importancia está por debajo de su nivel. Esto nos preocupa porque sería peor”, sostiene.
En la zona de 690 hectáreas protegidas uno encuentra aves como la pariguana, la choca de pico amarillo, entre otras especies. Además hay roedores, peces  y moluscos como el camarón. Al día visitan este santuario alrededor de 15 turistas, quienes para ver bien al mayor número de aves se quedan más de seis horas dentro del área protegida.
Aparte de este inconveniente la zona está en peligro por los agricultores que quieren ocupar la zona de amortiguamiento o de los empresarios que quieren hacer de las playas habilitaciones urbanas. Las lagunas están en peligro.
AGRICULTURA
Fausto Martínez heredó hace dos años parte de la tierra de sus padres. El año pasado sembró arroz y le fue mal. Este año todo augura que será peor. Sus dos hijos no tendrán lo que Fausto quiso darles. Este año la familia sufrirá los estragos de la escasez hídrica. Este año sufrirán por el fenómeno El Niño.
Hoy en el valle de Tambo (Islay) todavía se conservan en los techos de las casas las banderas con la inscripción ¡Agro sí, mina no! El día anterior el nivel de la cuenca del río Tambo estuvo por debajo de los 4 metros cúbicos por segundo (m3/s). Este miércoles figuró con alrededor  de los 11 m3/s. El aumento se pudo deber a las lluvias en las partes altas de la región.
Estamos en incertidumbre. No sabemos si esta crecida de la cuenca se debe a las lluvias en las partes altas o porque descargaron de la represa de Pasto Grande (Moquegua) como para decir que no hay inconvenientes –dice el presidente de la Junta de Usuarios del Valle de Tambo, Jesús Cornejo Reynoso.
En horas de la mañana, el dirigente se reunió con los representantes de la Autoridad Local del Agua de Tambo, los burgomaestres de Islay, Sedapar y las otras juntas de usuarios para conformar el Comité de Emergencia del valle agrícola, que tendrá reuniones permanentes.
En el Valle de Tambo existen más de 13 mil hectáreas legales, de las cuales en el 30% (alrededor de 3 mil 900 hectáreas) no se sembró por falta de agua. “Quizá ellos siembren o quizás no, ¿quién sabe? Yo sí me arriesgué porque confiaba en que iba a ganar, pero no es así”, cuenta el agricultor, quien asegura que invirtió más de 7 mil soles para sembrar arroz en su hectárea, pero que actualmente por la falta de agua su sembrío se secó.
“¿Quién me ayudará a pagar este dinero que invertí?, si todo es préstamo del banco”, refiere el cultivador, quien asegura que se prestó del banco 10 mil soles, pero que ahora no podrá santiguar la deuda porque no obtendrá ganancias. “¿Con qué voy a pagar?”.
Augura que la hectárea de su chacra que queda cerca de Mejía, solamente le permitirá recuperar menos de 5 mil soles. Por segunda vez trabajará a pérdida. “La otra vez fue por la huelga contra Tía María”, sostiene.
Cornejo Reynoso aseguró que esta temporada se siembra arroz. Este  alimento abastece diferentes mercados del sur del país. Sin embargo, este año se redujo. Se sembró en 5 mil 270 hectáreas, extensiones que solamente –estimó– cultivarán el 50% de lo sembrado.
-¿Por qué insistir en sembrar arroz si el Ministerio de Agricultura les avisó desde el año pasado que no lo hagan por el fenómeno El Niño?
“No depende del Gobierno, tradicionalmente Tambo es conocido porque por esta fecha siembra arroz, el Gobierno no puede ir contra la costumbre”, respondió por su parte el alcalde de Cocachacra, Helard Valencia Juárez, quien aseveró que no se les puede imponer no sembrar el cereal.
Cornejo Reynoso, por su parte, asevera que el interés del Ejecutivo es que no usen agua porque podría comprometerse para otros proyectos. “Tienen otro interés, porque creo que además podría deberse a que se quieren vengar del valle por el problema contra Tía María”, puntualizó.
 
 
 
 
DAÑO
Cornejo Reynoso sostuvo que el perjuicio económico hasta ahora es incalculable, porque si en esta temporada se verán perjudicados ocurre que en abril y en la próxima campaña será aún más complicado porque el Senamhi advirtió que habrá merma de lluvias en las partes altas.
Asegura que el Gobierno debería congraciarse con la zona y disponer las medidas para dotarles de los recursos hídricos que garanticen las cosechas. Son más de 30 mil agricultores perjudicados como el señor Fausto, quien a pesar de las adversidades confía en la agricultura.
 
 
Compartir


Leer comentarios