Madre y sus dos hijas fueron asesinadas salvajemente 

Los cadáveres de la joven madre y sus pequeñas hijas, fueron encontrados a un costado de la pista en el kilómetro 21 de la vía Arequipa – Chapi, en el distrito de Yarabamba. 

Los peritos de Criminalística llegaron al lugar y comprobaron que los cuerpos presentaban evidencias de degollamiento. 

Edgar Pinto Gómez, según los familiares de Mendoza, salió con las tres víctimas a comer y comprar ropa para las niñas. 

Pinto Gómez, según otro medio de comunicación local, fue contactado por las hermanas de Gabriela el jueves, pero él negó haberse encontrado con ellas. Posteriormente, cambió su versión y señaló que tomó con Gabriela Mendoza; dijo que estuvo muy ebrio y no sabe a dónde se fueron. Al final, al ser consultado nuevamente, se molestó e indicó que era lo último que iba a decir y cortó la llamada.

La hermana de la occisa, Carolina Mendoza, presentó la denuncia de desaparición el jueves, indicando que salió a la 1:00 p. m. del miércoles pasado y hasta el momento no sabían nada de ella.

Al promediar las 3:00 p. m. del viernes, agentes policiales detuvieron al principal sospechoso, quien fue acusado del horrendo crimen por el hermano de la víctima.  

El sujeto fue capturado, en Villa el Golf, distrito de Socabaya, por efectivos de la Comisaría de Yarabamba, en la vivienda de un familiar y fue trasladado hacia la Divincri.

ACEPTÓ EL CRIMEN 

Edgar Pinto (de acuerdo a lo difundido por el portal Lego Noticias) aceptó ayer ante los detectives de homicidios del Depincri y ante los remordimientos, que cometió los tres homicidios y llevó a los investigadores hacia el sector de Yarabamba para entregar el cuchillo de 25 centímetros y de mango de color negro que utilizó en los tres asesinatos y que estaba a 70 metros, dónde fueron hallados los cuerpos.

El operador de maquinaria pesada señaló que mató a su expareja porque no quería darle el divorcio y tenían problemas de dinero para la alimentación de sus dos hijas.

Uno de los primos de la víctima señaló que el principal sospechoso del crimen, Edgar Pinto Gómez, tenía antecedentes por maltrato familiar. “Cuando él convivía con mi prima, la encerró junto a sus dos hijas por dos días en su domicilio”, expresó Miguel Ángel Calla Mendoza.