Piden pena de muerte para mujer que asesinó a hija adoptiva
La justicia surcoreana solicita pena de muerte para una mujer acusada de asesinar a su hija adoptiva de tan solo 16 meses.
La acusada, de quien solo se dio a conocer su apellido (Jang), adoptó a la pequeña Jung-in en febrero del año pasado.
Lamentablemente, murió en octubre, a causa de graves lesiones abdominales y hemorragias internas por el uso de “fuerza excesiva” por parte de un agresor.
La fiscalía considera que la mujer pudo tener la intención de matar a la bebé o al menos ser consciente que podía morir como resultado de los abusos.
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Frente a esto, Jang sigue insistiendo en que la pequeña sufrió dichas lesiones debido a que la dejó caer accidentalmente.
En el caso del padre adoptivo, quien también es acusado de abuso de menores y negligencia, la fiscalía pidió siete años y medio de prisión.
Por otro lado, este horrible asesinato puso en el punto de mira a los servicios sociales y a la policía surcoreana.
Esto, debido a que no actuó inmediatamente, pese a recibir tres informes sobre sospechas de abusos en un lapso de apenas cinco meses.
El ministerio fiscal, que apunta que la mujer no siente ningún «remordimiento», solicitó el miércoles la pena máxima ante el tribunal del Distrito Sur de Seúl.
Se espera que emita su veredicto sobre Jang y su marido el 14 de mayo. Miles de personas han firmado peticiones online pidiendo una dura condena contra la mujer.
Cabe precisar que, en las últimas dos décadas, los tribunales surcoreanos rara vez han solicitado la pena máxima.
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