Editorial: Ayuda a Aplao

El alcalde Omar Candia y el gobernador regional Elmer Cáceres no vacilaron en convocar la tradicional solidaridad de los arequipeños con los pueblos hermanos y especialmente con los damnificados por daños causados por lluvias y desbordes de ríos en Aplao.

Candia hizo un aporte personal al auxilio que los arequipeños enviarán antes del 24 de febrero para ayudar a quienes han sufrido pérdidas importantes en lo personal y en lo material en la vecina provincia de Castilla.

Sabido es que Arequipa siempre ha sido generosa en circunstancias semejantes y que ha tenido el privilegio de recibir en oportunidad de catástrofe el concurso del Gobierno y de los ciudadanos que se conmovieron por la tragedia de Aplao y que se asombran de una decisión de las mujeres majeñas para iniciar la limpieza de la plaza mayor de la ciudad capital de Castilla para rehabilitar jardines y normalizar la vida urbana.

Arequipa que ha sufrido terremotos en tiempos más o menos recientes sabe lo que vale el apoyo moral y material de sus hermanos cercanos, y no será esta ni la primera ni la última oportunidad en que estemos bien dispuestos para hacer llegar a los que han sufrido daño por fuerzas naturales lo que requieren para recuperarse y volver a caminar hacia adelante.

A nivel nacional el mismo gesto lo ha tenido la Presidencia de la República, las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional para que una parte del territorio nacional pueda superar la contingencia confrontada por un fenómeno de El Niño, menos severo que el registrado en el norte en el 2017, pero que requiere del concurso de todos para ser superado.

Todos tenemos la obligación de colaborar con la recuperación de Aplao y también de elevar oración por las víctimas de las fuerzas naturales.