Editorial: ¿Es posible abandonar Majes Siguas?

Alrededor de Majes II, proyecto paralizado hace más de un año por desencuentros entre los ejecutores, el consorcio Majes y el Gobierno Regional, se han estado rumoreando, en forma cada vez insistente, la posibilidad de que todo lo avanzado hasta ahora estaría desanimando al consorcio Majes existiendo la posibilidad de que se retiren del proyecto si este no resuelve favorablemente la llamada adenda 13.

En realidad, se trata de una decisión impuesta por las circunstancias de evitar pérdidas por evaporación de recursos hídricos para poder alcanzar la proyectada meta de 38 mil hectáreas irrigadas y de la generación hidroeléctrica en las centrales de Lluta y Lluclla.

También se asegura que todo esto es consecuencia de un fallo del Tribunal Constitucional en una fórmula de solución a las exigencias de la provincia cusqueña de Espinar de obtener recursos de agua en esa jurisdicción. Esto ha sido desvirtuado por el carácter de la represa de Angostura que tiene suficiente recurso por tratarse de una presa capaz de reservar aguas para dos años y no solo para uno.

La adenda 13 plantea llevar las aguas de Angostura hasta las tierras por irrigarse por un sistema subterráneo y no por el tradicional de superficie que favorece la evaporación, sobre todo en épocas de altas temperaturas.

El Gobierno Regional de Arequipa, que presidió Yamila Osorio, apoyó la demanda y el Ministerio de Economía y Finanzas realiza un largo estudio para aprobarla o rechazarla.

A la parte técnica citada se han sumado puntos de vista expresados por políticos y parlamentarios que se oponen al reparto de tierras en parcelas de 200 hectáreas, planteándose alternativas de tierras con menor tamaño que afectarían un proceso decidido de agroexportación.

En los tiempos actuales no conviene en lo absoluto repetir el esquema de las cinco hectáreas que se usaron en el remate de terrenos de la primera etapa, tienen que ser necesariamente más grandes para favorecer el avance tecnológico y una exportación asegurada.

Es interesante saber si en tales condiciones el grupo Cobra del consorcio Majes se animaría a seguir en el empeño, pues de lo contrario, Majes sería postergada en su ejecución, no solo por meses, sino por años.

Hay que encontrar una fórmula satisfactoria para las mayorías con respecto al sistema de riego de Majes y al tamaño de las parcelas para no repetir errores de la primera etapa y poner al alcance de agricultores arequipeños lo que se terminará ofreciendo como oferta de adenda.