Editorial: Lo que falta en la Reforma Judicial

A mayoría ciudadana le interesa que en la proyectada reforma judicial se consideren formas que permitan el pronto trámite de los litigios a que se ven obligados en demanda de justicia.

La queja más generalizada entre todos aquellos que acuden a jueces y vocales, el problema más engorroso por confrontar, está en que los juicios terminan muchos años después de iniciados y el argumento de descargo de los magistrados siempre es el mismo: les falta tiempo para procesarlos.

La carga procesal es aducida como razón básica de los juicios largos y adicionalmente se mencionan otros factores que sí podrían ser parcialmente resueltos por el reemplazo del desaparecido del Consejo Nacional de la Magistratura, por lo que ahora se ha dado por denominar Comisión Nacional de Justicia, en proceso de arreglo en la legislatura extraordinaria que debe culminar en días más.

Entretanto persisten las demoras y en caso reciente que bien merece citarse se encuentran los sucesos que se produjeron entre marzo y mayo del 2015 alrededor del proyecto de explotación minera de Tía María.

Son cuatro años que han pasado y todavía no hay acusación fiscal para poder determinar las responsabilidades de quienes produjeron hechos que la justicia no ha esclarecido y que también determinaron prisiones que hasta ahora no se sabe sí tenían sustento suficiente para castigar o para absolver.

Los casos se reactualizan ahora tras cuatro calendarios pasados y justamente cuando se está buscando una solución al problema que determina definiciones para proyectada inversión de mil 400 millones de dólares o exigencias necesarias para defender la agricultura y permitir la convivencia con la minería en una región que lo requiere a la brevedad posible. Esa es la justicia que se quiere cambiar y en la que interesan mucho las personas que actúan de fiscales y de jueces.

Tiene que encontrarse una fórmula eficaz para que los procesos judiciales se resuelvan más rápidamente, es la mejor reforma judicial que esperan los peruanos.