Editorial: Preparando el 2022

En el año 2022 se realizará en Arequipa un Congreso Internacional de la Lengua Castellana por gestión del escritor Mario Vargas Llosa, y, desde luego, con el auspicio del gobierno peruano, que no vaciló en solicitar que esta ciudad sea sede de un foro académico de primer lugar sobre la lengua que se hablan la mayoría de peruanos.

Los atractivos de la ciudad para ser sede de esta importante reunión mundial eran evidentes cuando Mario Vargas Llosa hizo la propuesta en un congreso similar que se realizó en Córdoba (Argentina).

La Municipalidad Provincial de Arequipa asumió la tarea de ir acondicionando, sobre todo, el Centro Histórico, pero para que los académicos de la Real Academia de la Lengua y de los grupos electos de cada una de las naciones castellanas puedan encontrar un lugar adecuado para tratar problemas del idioma, incorporar términos nuevos y desaparecer los que están en desuso.

Entonces llegará la ocasión de demostrar que en Arequipa se habla y escribe bien el español, y por eso se ha pedido la colaboración de jóvenes universitarios para que adviertan los errores que pudieran cometerse en cuanto letrero existe en la ciudad con fallas ortográficas y proyectado retirar todo lo que no esté en armonía con el deseo de expresarse bien y de escribir mejor.

Por de pronto, se han retirado 350 letreros identificatorios que violaban normas reglamentarias y que malograban el Centro Histórico, pero hay que hacer más tarea en este sentido.

El 2022 los peruanos estaremos gobernados por quienes sean elegidos, en el proceso deseado por el gobierno en el 2020 o el del 2021, en el caso de no prosperar el adelanto de renovación de gobierno; y Arequipa debe estar preparada para responder a un reto internacional de gran magnitud y categoría.

El Congreso Internacional de la Lengua Española, que se realizará en el año 2022, no solo debe encontrar una bonita ciudad sede, sino un lugar donde se hable bien y se escriba mejor el idioma castellano.